miércoles, 11 de febrero de 2015

Remedio casero para el cabello graso: agua oxigenada

Como muchos de ustedes sabrán, el agua oxigenada, junto con otros productos, puede usarse para aclarar el pelo. Pero, asimismo, tiene un uso menos conocido dentro del ámbito del cuidado del cabello: combatir el exceso de grasa.
Dentro de los usos reconocidos del agua oxigenada está el de ser un antiséptico general muy poderoso. Al producirse la oxidación se generan radicales libres que atacan una amplia gama de compuestos orgánicos; entre ellos, lípidos (grasa). 

Para este remedio casero que les traemos hoy deben esparcir agua oxigenada por todo el cabello y dejar reposar por quince minutos. Una vez trascurrido este tiempo, enjuagar con shampoo. Al momento de enjuagar deben tener mucho cuidado ya que el agua oxigenada es un producto fuerte y puede irritar mucho los ojos en caso de contacto. 
La principal ventaja de este remedio radica en que el agua oxigenada es eficaz, fácil de conseguir y barata. El problema con este remedio en particular es que el agua oxigenada no es un producto desarrollado específicamente para el cuidado capilar. Esto genera dos inconvenientes: por un lado, el producto no es selectivo, así que además de combatir la grasitud puede llegar a eliminar algunas sustancias que son útiles para el cabello. Por esta razón se recomienda usar este remedio cada tanto (por lo general una o dos veces por semana dependiendo de que tan graso sea el cabello). Por otro lado, el producto, al no estar pensado específicamente para un uso capilar, puede generar irritación en caso de contacto con los ojos. Pero este problema puede ser paliado manteniendo los ojos cerrados durante el proceso de enjuague.

¿Ya probaste este remedio casero? ¡Comentanos qué tal te fue!

Cabello graso: definición y causas

El cabello puede clasificarse de acuerdo a diferentes criterios. Uno de los más usados es en función de su emulsión epicutánea (es decir, en función de las secreciones sebáceas (grasitud) y sudoríparas (transpiración) de la piel). 
Así, de acuerdo a este criterio, el cabello podrá clasificarse en normal, seco y graso. En esta entrada nos vamos a concentrar en el último tipo de cabello: el graso. 
El cabello graso se caracteriza por una emulsión epicutánea con alto contenido graso. Esta secreción excesiva de grasa le da al cabello un aspecto brillante, pegajoso y apelmazado.
Como todo fenómeno complejo, el cabello graso tiene múltiples causas: 
- Lavado inadecuado: el exceso de shampoo o el uso de productos muy fuertes puede afectar el pH de la piel y estimular la secreción de las glándulas sebáceas.
- Factores genéticos: la tendencia al cabello graso puede ser hereditaria.
- Factores hormonales: como las hormonas influyen en las secreciones grasas del cuerpo, es lógico suponer que toda alteración hormonal puede tener algún afecto en la grasitud del pelo. Así, por ejemplo, durante la pubertad y el embarazo, momentos de gran alteración hormonal, el cuero cabelludo suele ser más propenso a la grasitud. 
- Cabello muy fino: cada pelo tiene dos o tres glándulas sebáceas que lo humectan; en caso de que el cabello sea demasiado fino, la producción de grasa resulta excesiva para tal efecto y el pelo no llega a absorber todo la grasitud que se produce. En estos casos, el exceso de grasa se deposita en el pelo, dándole ese aspecto sucio y opaco que caracteriza al pelo graso.
- Alimentación deficiente: hay un viejo dicho que afirma que "somos lo que comemos" y, el caso del cabello, no es la excepción. Las dietas con exceso de grasas y falta de frutas y vegetales (vitaminas) tienden a estimular la secreción de grasa. 

Si bien no existe una cura definitiva para el cabello graso, en entradas futuras vamos a ver algunos tips y trucos para tratar esta afección del cuero cabelludo. 
También nos gustaría que ustedes compartan con nosotros los tratamientos caseros que han hecho y si les han resultado así enriquecemos el blog con sus experiencias.